Voto de silencio, simplemente amor
Por: Miranda Trincheri (colaboradora)
La historia de un beso. Un cuento de amor y de silencio.
Por: Miranda Trincheri (colaboradora)
Amigo -che, y vos que hiciste en la obra?”
Dramaturgista- el “dramaturgismo”
Amigo: lo qué?
Dramaturgista: Dramaturgismo, es un término que acá no se usa mucho pero en otras partes del mundo sí. Fue una excusa. Es un rol dentro del grupo.
Amigo: vos sos eso?, dramaturgista?
Dramaturgista: no, no es algo que se es, sino algo que se inventa. Que se hace cada vez. Entendes?
Amigo: Sí. ¿y qué hace una dramaturgista?
Dramaturgista: En general se encarga de tender un puente entre el texto escrito y la puesta en escena.
Amigo: cómo un puente?
Dramaturgista: Claro, un diálogo, un cuestionamiento sobre cómo se están montando los signos de la obra y cuál es su relación con el texto.
Amigo: ahh!!! Ya voy entendiendo! Y cuál es la dinámica?
Dramaturgista: yyy, se da por diálogo, por observación de ensayos, por escribir ideas y ponerlas a prueba, por conceptualizar, por confrontación, por discusión, por poner en jaque, por detectar, por estar atenta, por acompañar.
Amigo: Y para qué necesitaría un director a una dramaturgista?
Dramaturgista: No siempre es necesaria/o, pero supongo que para mantener grados de distanciamiento y objetividad sobre lo que se está haciendo.
Amigo: y como te fue?
Dramaturgista: Ame este proyecto de principio a fin. La directora es muy generosa y abierta. Y además, es mi amiga, toda una suerte!
Amigo: Gracias! Ahora ya sé lo que caranchos es un dramaturgista!!!
Dramaturgista: de nadas, che.
Mariana Gianella (Dramaturgista)
Obra de teatro “Voto de silencio”
Los días lunes a las 20.30hs podemos hacer una cita con el teatro creado, interpretado y dirigido desde los jóvenes y para tod@s.
“Voto de Silencio” es una sucesión de climas y misterios de las reacciones del alma humana. La verdadera creación se da en el desarrollo de los personajes, muy distintos en sus vidas cotidianas, pero muy similares en el respeto que se profesan a sí mismos.
Una constante de nuestras vidas entre la pasión y la racionalidad, la duda y la audacia, el temor a lo nuevo, el punto de giro que hace de una decisión trascendente, la apertura a la conciencia de nuestro propio ser desvalido, en tanto necesita de otra mirada para ser confirmado.
De la incertidumbre a la confianza, en el camino de la búsqueda de sentido de sus propias vidas, el espectador se adentra en una trama gestual y de pausas, de iluminaciones y de cierres que lo remiten a la propia inocencia, al despertar, a las dudas sobre qué hacer con nuestra existencia, a la búsqueda de la autenticidad y finalmente a la rendición frente al amor.
Puesta donde las palabras tienen la misma y exacta densidad que los silencios. Cuántas veces experimentamos que “el silencio habla.”...cuántas veces el silencio dice más que las palabras...
La obra se encarna en un escenario ascético y al mismo tiempo cada elemento de la escenografía y de las luces hacen que nos sintamos en clima, que vivamos no solo cada día, en sus dimensiones, sino cada momento en su plenitud.
Para no perderla.
Reservas en el t.e 4864 4230
Raquel Gianella
“cine mudo: no es que le falten los sonidos, es que tiene el silencio” escribió la poeta cubana*.
La obra presenta al teatro. Sintética, cuasiminimalista, no pocos sino mínimos elementos. Como espectador uno puede palpar el mundo y agregarle el propio. La obra habilita esa posibilidad tanto desde la puesta en escena, las actuaciones de extrema sensibilidad, entrega y generosidad, como por el texto que nos contagia. Transviaja imágenes alusivas que nos hacen ver allí donde no hay. La obra tiene el movimiento del mar; fluido, fuerte y envolvente.
la fluidez se la llevan las actuaciones con sus sutilezas y diferentes respiraciones, el texto con sus imágenes,
la fuerza la dirección del silencio
lo envolvente a uno.
Los ritmos y fuerzas que luchan en cada personajes, así, convidadas como en un acuario nadando en la escena diminuta del mismo escenario que es 2 y mil espacios por los que transita el cuerpo del amor.
Lo infantil, lo inocente y la insurrección que conlleva el amor cuidar
No puede ser que sólo lo feo sea verdad dice un personaje ante la emoción desbordante y la belleza con que el amor viste a la cotidianeidad con su manto liviandad amor amoral, revelación de que los momentos florecen y alcanza a las fibras.
Esta obra abre la puerta a cómo al amor en su estatuto de verdad le resulta imprescindible prescindir y por lo tanto revuelve, decide:
para que haya amor o amor cuando:
no necesitar comprar, vender, tener , clasificar, no más y más, no hablar todo el tiempo, no hablar casi todo el tiempo, casi no hablar. Con menos, decir silencios.
Deja en jaque al lenguaje la obra, no se pregunta por el lenguaje como sistema de signos, como estructura-institución, habita allí donde la acción inscribe textos con los que dialogar.
Los personajes se cuentan los sueños. Y viajan a uno de ellos
Salto de piano, la lluvia, el sol, el campo, el tren, la ciudad lejos, la valija-cama, el hombre niño, la muchacha-que se muda.vestidos de amor y de flores.de bicicletas y pastel. el desayuno ritual. un dedo de perfume en cada trasoreja. Una campana. Salto y beso.
No hay truco no hay efecto especial, la magia se desvela.
voto de silencio: no es que le falten palabras, es que tiene lo que pasa.
Gracias por este regalo.
*Fina Garcia-Marruz
Valeria Fadel
Las habladurìas del mundo
Toda toda la ternura me darás
si te ofrezco ser
parte de tu cuerpo
Y ya al acariciarme me darás
los espejos que son de tu día del alma
Mientras oigo trinos voces oigo más
son aquellos los dioses que nos
escuchan
No estoy atado a ningún sueño ya
Las habladurías del mundo
no pueden atraparnos
Veo veo las palabras nunca son
lo mejor para estar desnudos
Ni ni la anaconda es como el buey
ya no hay más reyes de la selva
Toda toda la ternura me darás
si te ofrezco ser carne de tu cuerpo
No estoy atado a ningún sueño ya
Las habladurías del mundo
no pueden atraparnos
Pescado Rabioso
Voto de silencio me hizo apreciar el tiempo, cada momento me sentí atraída por lo que iba pasando y sentí la historia cerca, fui espectadora de besar con la mirada. Un inocente y profundo juego con la mirada, cuando eso se hace inevitable.
Apreciar el tiempo, besar con la mirada. El juego inocente y elegido de mirar, de ver. Bellos actores para ese juego, donde la luz, la música, el espacio y la dirección están siendo parte vital para detener el tiempo y contar. Todos necesitan contar ese beso.
Sentí una pieza sutil, me hicieron apreciar lo pequeño con una intensidad suave. Todos elementos teatrales colaboran precisamente en contar la historia de este beso. Nada se ve más que otra cosa, todo es parte. Me hizo detener el tiempo en ese gesto bello de mirarnos y besar. Ese beso que está llegando. Me quedé con la mirada de los dos actores, con lo que construyen con eso, y que si lo recuerdo puedo construirlo otra vez.
juliana muras
En un beso,
sabrás todo lo que he callado. Pablo Neruda
Había una vez… una estación de tren… de un pueblo. Un vagón de un tren negro, antiguo, con chimenea en el techo de la locomotora. En el andén había algunas personas que iban y venían, como medio perdidas y caminando rápido… como en una película antigua… El andén era techado con techo de chapa y había un kiosco de diarios a la derecha que estaba cerrado. Y humo… no… niebla… no, era humo, de la chimenea de la locomotora… Era de noche. El cielo estaba gris. Lloviznaba. Había un hombre con una valija muy grande que trataba de subir por una de las puertas del vagón. Se sostenía con una mano del pasamano del tren y con la otra cargaba la valija. Le costaba mucho hacer eso. La valija pesaba mucho y él cuidaba esa valija como si adentro hubiera… algo muy importante. Y muy delicado. Como de cristal…
Soñé algo lindo.Tenía un pañuelo en la cabeza y un vestido floreado. Había muchos chicos alrededor mío. Y yo tenía una torta recién hecha en la mano. Estaba todavía tibia. Era en la puerta de la bicicletería. Vos atendías a la gente, y yo te estaba llevando la torta. Y se llenó de chicos, por el olor, que querían un pedacito. Y yo me reía. Y vos también.